Aunque parezca un argumento de película, el hecho ocurrió hace unos días en el aeropuerto de Manchester (MAN).
Un niño de 11 años fue capaz de sortear los controles de seguridad en el aeropuerto británico y llegar al avión con destino Roma (FCO) sin pasaporte ni tarjeta de embarque.
El pequeño siguió a una familia que no era suya, consiguiendo ser registrado por el personal del aeropuerto. Atravesó los controles y se sentó en el vuelo a Roma de la aerolínea de bajo coste británica Jet2.com
Ni el personal del aeropuerto, ni la tripulación de la aerolínea se percataron de que el pequeño iba solo, hasta que los pasajeros, en pleno vuelo, se dieron cuenta de que el niño viajaba sin acompañantes e informaron al comandante para que comunicara la situación a las autoridades en tierra.
Horas después, el vuelo aterrizó en el aeropuerto de Fuimicino y el pequeño regresó a Manchester en el mismo avión. Alrededor de las 20.00 GMT de anoche se reunió de nuevo con su madre.
Un portavoz del aeropuerto de Manchester explicó que el incidente se debió a una revisión «incorrecta» de la documentación del menor tanto en el control de seguridad como en la puerta de embarque y afirmó que «Este asunto extremadamente grave está siendo investigado por responsables del aeropuerto y de la aerolínea».
Varios trabajadores, tanto del aeropuerto como de Jet2.com, han sido suspendidos durante el tiempo que dure la investigación.