Trabajar como azafata puede ser exigente, especialmente cuando se trata de vuelos largos y horas irregulares. Aterrizar en una ciudad vibrante como Londres ofrece múltiples oportunidades para relajarse y recargar energías antes del próximo vuelo. Aquí les presentamos siete planes ideales para desconectar y disfrutar de la capital británica al máximo.
1. Un paseo por Hyde Park
Hyde Park, uno de los parques más grandes y famosos de Londres, ofrece un respiro perfecto de la ajetreada vida urbana. Con más de 350 acres de naturaleza, es el lugar ideal para disfrutar de un paseo tranquilo o incluso alquilar una bicicleta y recorrer los senderos. Además, el parque alberga el Serpentine, un lago encantador donde se puede alquilar un bote de remos para experimentar un momento de paz en medio de la ciudad.
2. Experiencia de spa en Mayfair
Después de un día largo, nada se compara con una sesión relajante en un spa de lujo. Mayfair está repleto de opciones donde profesionales ofrecen masajes, tratamientos faciales y terapias de relajación que ayudarán a revitalizar el cuerpo y la mente. Optar por un tratamiento personalizado puede ser exactamente lo que necesitas para combatir el jet lag.
3. Tarde de arte en la Tate Modern
Para las azafatas con un interés en el arte y la cultura, una visita a la Tate Modern puede ser increíblemente enriquecedora. Este museo, ubicado en el antiguo Banco de la Central Eléctrica de Londres, alberga algunas de las obras de arte contemporáneo más significativas del mundo. Explorar sus galerías es una forma perfecta de sumergirse en un ambiente creativo y estimulante.
4. Cena tranquila en Covent Garden
Covent Garden es conocido por su vibrante escena de restaurantes y bares. Aquí se pueden encontrar desde opciones de alta cocina hasta pequeños bistrós con encanto. Disfrutar de una cena tranquila mientras se observa el bullicio de la ciudad puede ser la manera perfecta de terminar un día agitado. No olvides probar algunos de los platos británicos clásicos o internacionales ofrecidos.
5. Crucero al atardecer por el Támesis
Tomar un crucero al atardecer por el río Támesis ofrece una perspectiva única de Londres. Desde el agua, se pueden admirar algunos de los íconos más emblemáticos de la ciudad, como el Parlamento, el London Eye y la Torre de Londres, todos iluminados bajo el cielo crepuscular. Es una experiencia pacífica que permite ver la ciudad desde una óptica diferente, más información aquí.
6. Yoga en el Shard
Participar en una clase de yoga en uno de los edificios más altos de Londres, el Shard, puede ser una experiencia revitalizante. Las clases suelen realizarse en plataformas altas, ofreciendo vistas impresionantes de la ciudad mientras se practican posturas y se medita. Es una excelente manera de alinear cuerpo y mente después de las demandas del trabajo aéreo.
7. Noche de teatro en el West End
Finalmente, ninguna visita a Londres está completa sin una noche en su famoso distrito teatral, el West End. Aquí se presentan algunas de las mejores obras de teatro y musicales del mundo. Escoger una obra y dejarse llevar por las actuaciones y narrativas es una forma sublime de escapar de las tensiones del día a día.