Después de cientos de embarques de pasajeros cabezones , una casi no se cree que un embarque discurra con normalidad y sin ninguna incidencia.
Imagina la situación: hoy todos están embarcando ordenadamente, sin empujones, sin maletones, sin hacer colas en el pasillo, e incluso sin agresiones. Todo parece estar en perfecta armonía y días así son los que te recuerdan por qué sigues levantándote a las 4.10 de la madrugada y te tiras 12 horas en el avión.
Feliz, motivada y con una sonrisa de oreja a oreja, sigues saludando a todos los pasajeros que entran, mientras echas una ojeada a los que ya están sentados y orgullosamente observas que ¡hasta tienen el cinturón de seguridad abrochado!
Todo fluye. Fluye.
Fluye hasta que suena el P/A con una llamada desde cockpit y escuchas el famoso “Vamos-a-repostar-combustible-aplica-el-procedimiento”
…Cómo diría Mourinho ¡¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué ahora? ¿Por qué en este embarque en el que todo iba perfecto?!
Tu dices:
“Señores pasajeros, vamos a proceder a repostar combustible. En aplicación de las normas internacionales de seguridad, les rogamos apaguen todos sus dispositivos electrónicos, ocupen sus asientos, mantengan el cinturón de seguridad desabrochado y dejen libres los pasillos. Muchas gracias”
Ellos escuchan:
“Señores pasajeros, blablablablablablabla blablablablablabla y abróchense el cinturón de seguridad”.
Ni que apaguen los móviles, ni que se sienten, ni que despejen los pasillos y por supuesto, muchísimo menos que se desabrochen el cinturón. Comprobado.
Así que ahora toca ir uno por uno, batallando contra la evidencia:
Fila 1:
- Señor, por favor, apague el móvil.
- ¿Por qué si todavía no habéis cerrado las puertas?
- Porque vamos a repostar
- Pero las puertas siguen abiertas y siempre decís que los móviles pueden estar encendidos “hasta el cierre de puertas”
- Ya, pero es que ahora estamos repostando, así que va a tener que apagarlo
- Sólo 1 minuto que termino de enviar este…
- ¡Apáguelo!
Siguiente fila:
- Señora, por favor, siéntese. Estamos repostando combustible y tiene que dejar el pasillo despejado.
- Es que yo no puedo estar mucho tiempo sentada que tengo mala circulación y prefiero estar de pie ahora.
- Durante el vuelo, si no hay turbulencias podrá levantarse y caminar por el pasillo. Ahora tiene que sentarse.
- ¿Turbulencias? ¿Se va a mover mucho el avión? Ay Manolo, que Puri me dijo una vez que casi se cae el avión cuando volvían de Torremolinos y fue por una turbulencia grande.
- No creo que haya turbulencias, relájese y siéntese por favor.
- Pero señorita, usted me ha dicho que va a haber turbu…
- ¡Siéntese!
5 filas más atrás (los papás con los mellizos):
- Buenos días. Tienen que desabrocharse el cinturón. Tanto ustedes como los niños.
- ¡Uy! Con lo que nos ha costado abrochárselo…¿No podemos dejárselo puesto?
- No, tienen que desabrochárselo todos. Estamos repostando combustible y debemos cumplir el procedimiento.
- (El papá con el DVD encendido) Pues no sé qué tendrá que ver el cinturón con el combustible.
- Tiene su explicación. Además, tiene que apagar ahora el dvd de Pocoyo.
- ¿Y qué hacemos con los niños? No tiene sentido. En la gasolinera no apagamos el dvd…se van a poner a llorar.
- Sí tiene sentido, créame.
- ¿Ah sí? ¿Y cuál es la razón? Siempre con órdenes tontas. Primero que nos abrochemos el cinturón, después que nos desabrochemos el cint…
- La razón…quiere saber la razón ¿eh? Pues la razón “tonta” es esa mangueraca que está echando unos cuantos de miles de litros de combustible, justo a su lado y al de sus niños. En el mejor de los casos, si hay algo que haga que salgamos volando por los aires, tendremos que hacer una evacuación de emergencia. Y usted, su mujer y sus dos mellizos tendrán que desabrocharse los cinturones en cuestión de 1 segundo, quitarle el dvd de encima y salir pitando. Apuesto a que no lo conseguiría.
Al lado de los mellizos:
- ¡Hola! Buenos días señora. Tiene que desabrocharse el cinturón.
- Sí perla, ya lo tengo abrochado.
- Que no, que se lo tiene que desabrochar, no abrochar. Que estamos repostando combustible y ha de desabrocharlo.
- Maja, lo tengo abrochado. Mira.
- Si señora. Veo que está brochado, pero tiene que desabrocharlo. Permítame que se lo desabroche.
- …. a la vuelta de revisar la cabina:
- Señora, ¿se ha vuelto a abrochar el cinturón? Tiene que desabrocharlo.
- Sí, lo he abrochado porque tú me lo abrochaste mal antes, y se me aflojó.
Ok. Tranquila. Ya hemos terminado de repostar. Ahora sólo queda por delante 12 horas de vuelo, 4 saltos, tomarse un café bien cargado para olvidar que te has levantado a las 4 de la madrugada y que no llegarás al hotel hasta las 5 de la tarde. Que el siguiente vuelo de la mañana es un Madrid-Ibiza con el avión a tope de adolescentes y que el chico del cátering todavía no ha llegado con las comidas. Relax. Paciencia…Mira por la ventana y piensa en que los amaneceres más bonitos siempre se ven desde aquí arriba.
Os dejo el procedimiento de repostado de combustible con pasajeros a bordo.
- Después de recibir la orden del comandante, se informa a los pasajeros de la siguiente forma:
“Señores pasajeros, vamos a proceder a repostar/vaciar combustible. En aplicación de las normas de seguridad, les rogamos que se abstengan de utilizar cualquier tipo de aparato electrónico. Por favor, ocupen sus asientos, mantengan los cinturones de seguridad DESABROCHADOS y deje libre los pasillos y salidas de emergencia. Gracias” - El número de tripulantes de cabina a bordo, no será inferior al mínimo establecido y éstos se colocarán junto a las salidas de emergencia que se haya previsto utilizar para una posible evacuación. Si durante la carga o descarga de combustible estuvieran retiradas todas las escaleras o fingers, TODA la tripulación de cabina se situará en las salidas de emergencia. Durante la operación de carga de combustible se abstendrán de realizar ningún otro cometido a bordo.
- Está completamente prohibido no solo fumar, sino encender cualquier tipo de chispa, así como la manipulación de hornos del galley, flashes de cámaras de fotos, radios, dvds, teléfonos móviles y ordenadores.
- Las puertas que permanezcan abiertas deberán estar bloqueadas, libres de obstáculos y mantener acoplados escaleras o fingers para la evacuación.
- Las puertas que no se vayan a utilizar para el embarque/desembarque deberán permanecer completamente cerradas, blocadas, con las rampas armadas y libres de obstáculos. (Tripulación de cabina, asegúrense de que los camiones de catering, señaleros etc…estén suficientemente alejados de las salidas del avión en previsión de una posible evacuación).
- Las cortinas deberán estar abiertas y sujetas. El movimiento de pasajeros deberá limitarse al mínimo indispensable.
- La cabina deberá estar perfectamente asegurada según el procedimiento de “Cabina asegurada”
- No podrá hacerse uso de oxígeno medicinal o de primeros auxilios.
- Se notificará inmediatamente a cockpit cualquier circunstancia que se considere peligrosa. Presencia de humos, olores o fuego.
- Tripulantes de cabina preparados para efectuar una evacuación de emergencia en caso de incendio u orden pertinente del comandante. Felices vuelos a todos… ¡Y felices repostajes!