El vuelo de Ryanair FR4632, con 93 pasajeros abordo, procedente de Valencia y con destino Bérgamo (Italia) ha tenido que realizar un aterrizaje de emergencia en Génova a causa de una despresurización de la cabina.
El comandante, tras ver una señal luminosa que indicaba una posible despresurización procedió a un descenso controlado, siguiendo la normativa de seguridad. Por su parte en la cabina, las máscaras de oxígeno se desplegaron de los paneles.
El B737-800 de la irlandesa aterrizó en Génova sobre las 09h50, donde, siguiendo procedimientos de aterrizaje de emergencia, bomberos y ambulancias atendieron a los pasajeros. Dos pasajeras tuvieron que ser trasladadas al hospital por fuertes dolores de oído una y un fuerte golpe en el pecho la otra.
La compañía ha pedido disculpas por los inconvenientes y ha fletado un autobús hasta Milán para los pasajeros. El avión está siendo revisado por mecánicos a fin de esclarecer lo sucedido.